LA ADOLESCENCIA

Motivación

LA ADOLESCENCIA

LA ADOLESCENCIA CON LÍMITES, REGLAS Y CONSECUENCIAS

“Me vale que me castigues, igual lo voy a hacer “

En mi constante trabajo con padres de adolescentes, los mayores proveedores de experiencia son los padres, los cuales contantemente me regalan frases cómo estás:

“Hoy día los padres le tememos a los adolescentes “

“Si ponemos límites como padres somos anticuados”

“Ya no sé qué más hacer, todo le da igual “

“Siento que hago cosas de las cuales me arrepiento como padre”

“Siento que ya es un caso perdido”

Recuerdo que en una sesión de coaching con orientación una madre hablo 37 minutos sin parar y al terminar lo primero que hizo fue llorar y respirar, me pregunté ¿qué más había detrás de sus lágrimas, además de su rostro descompuesto?

 Los límites, castigos, reglas, premios y todos los componentes educativos en esta dirección son temas importantes cuando tenemos una persona adolescente, estoy segura que si tu estas leyendo esto es porque quizás piensas igual.

Tener un adolescente que actúa de manera rebelde, muy enojón, retador, quejumbroso, es como estar en un aguerra y no tener con que defenderse, y muchas veces como padres recurrimos a armas que no son las más eficientes para el caso, es en este momento cuando surge muchas preguntas desde nuestro inconsciente:

¿Son buenos los límites?

¿Cuáles son los principales límites que debemos poner?

¿Los castigos son buenos o malos?

¿Debo darle premios por hacer las cosas?

¿Qué más puedo hacer si ya lo he intentado todo?

Es importante que sepas que no existen ningún experto en la materia que no crea que los límites no son necesarios, sino esenciales e indispensables en la, educación de nuestros adolescentes.

Cuando un adolescente no tiene límites y reglas se sienten inseguros e inestables, esto me quedó clarísimo un día que un adolescente de 15 años me dijo en una sesión “odio a mi mamá, todo el tiempo esta regañándome”. Me dio mucha tristeza claramente escuchar eso y continúe escuchando, suele ser difícil que expresen lo que les duele, por eso es tan necesario escuchar con claridad las necesidades que tienen los adolescentes.

Cuando un adolescente tiene límites por más que alucinen, mientan y se sientan a veces confundidos, se sentirán seguros porque sabrán que están en un terreno firme y les sirve de referencia para crecer y madurar.

La adolescencia es difícil, imagínate sin reglas y límites, si una guía, sería entonces muy fácil perderse y sentirse solos. Los límites son para ellos como una luz, siendo ellos un acantilado oscuro y profundo por todos los cambios emocionales propios de la edad.

CÓMO PONER LOS LÍMITES Y LAS REGLAS

Los especialistas, psicólogos y pedagogos reconocidos han ido hecho estudio que nos permiten saber que las formas de poner límites y reglas han ido mejoradas y otorgando bases más firmes otorgando. Algunas veces los padres pretendemos resolver todo llenándose de reglas y el adolescente ante tanto busca como romperlas porque se asfixia

Cuáles son las mejores técnicas actuales en base a nuestra experiencia, y lo que dicen los actuales estudios.

  1. Hazles ver que estás de su lado: aunque e a estas alturas muchas veces parece que el amor de los padres no les importa a los adolescentes, es lo contrario, lo necesitan, más de lo que se imaginan. Poner las normas y reglas juntos desde el amor y el respeto, esto parece absurdo para algunos padres sin embargo la experiencia de lo que veo a diario a mí me dice lo contrario, porque cuando existe un problema el adolescente no te vea como un verdugo y se pueda dar cuenta que el problema es la conducta no los límites que pusieron.
  2. Es necesaria la imparcialidad: una de las cosas que más les interesa a los adolescentes es la imparcialidad, ellos respetarán a padres, maestros y a cualquier que tenga autoridad, que ellos crean que es imparcial, en esta imparcialidad es necesario al ponerla regla inmediatamente poner la consecuencia de no cumplirse. El adolescente cunado no conoce la consecuencia y cree que lo manipulas a tu antojo, no siente que puede influir en las cosas que pasan, porque para ellos los adultos cambian las cosas, como quieran.
  3. Que sean claras tanto las reglas como las consecuencias: cuando pones las reglas y al mismo tiempo las consecuencias, las cosas en su cabeza cambian por completo, porque de alguna manera le dices “si haces esto, o no lo haces, va a suceder esto “, siendo así ya sabe a que atenerse y entonces genera responsabilidad. Tener la regla clara es muy importante para que el adolescente sepa dónde está la línea, y pueda decidir si la cruza o no.
  4. Que sean específicas tanto las reglas como las consecuencias: las reglas y las consecuencias deben ser específicas porque los adolescentes toman la palabra de manera literal, por ejemplo, si los dejas solo en casa un fin de semana y les dices ¡no se te ocurra hacer una fiesta!, pero resulta que reúne a 5 amigos en casa y hacen desastre y eso no es fiesta. No hay que dejar nada a la suposición y además saber que ellos no piensan igual que nosotros, por eso hay que darles el contexto claro y completo. Para tu adolescente las cosas pueden tener un significado diferente. En cuanto a las consecuencias no las dejes abiertas tampoco se claro y específico. Si las cosas no se ponen claras desde el principio, son puntos en tu contra porque en lugar de tener una consecuencia por lo que no hizo, se van a quedar todas las horas del mundo discutiendo por lo que él cree que sí hizo y lo que tú en realidad esperabas.
  5. Importante dar libertad: si hay algo que la experiencia me ha enseñado trabajando con adolescentes es que, si los padres les dicen que hagan algo estrictamente, ellos harán todo lo contrario, y perderás toda tu atención.

HABLAR DE CONSECUENCIAS

Seguramente hay días en quien sientas que ya no puedes más con tu adolescente y dices cosas como ¡RENUNCIO!  pero hay algo mágico para esto y sella consecuencia, para aplicar esto mágico debes darte cuenta de ciertos indicadores, las consecuencias no sirven sino las cumples.

Las consecuencias son herramientas muy importantes que existen para modificar la conducta, si las aprendemos a manejar y a hacer cumplir tenemos la mitad del camino ganado y para esto es muy importante que la consecuencia sea natural, te pongo tres ejemplos para que estes mas claro en todo:

EJEMPLO 1:

“La ropa que se lava en casa es la que está en el sesto de la ropa sucia, si la dejas tirada en el cuarto y no la metes en el sesto no se va a lavar “

La consecuencia es no tener ropa limpia

EJEMPLO 2:

“Si te sigues peleando con tu hermano significa que no pueden convivir y entonces no pueden ir al cine juntos”

La consecuencia es que se canceló su salida

EJEMPLO 3:

“Te presto el auto, pero necesito que llegues aquí a las 7:00 pm porque tengo una cita médica, sino llegas a tiempo no te lo puedo volver a prestar “

La consecuencia es que si llega tarde te quedas sin coche y cita médica y no hay más auto

Cuando las consecuencias son naturales los adolescentes lo entienden mejor, y su cerebro empieza a usar esa lógica para saber qué consecuencias puede haber en cada problema, y así pensar dos o tres veces si se la juegan o no.

Siete de cada diez adolescentes sienten que hacen mucho más por sus padres que sus padres por ellos. Cuando tengas muchos problemas por la falta de obediencia, funciona retirar tu cooperación.  Al principio no va a pasar nada, pero rápidamente tu hijo o tu hija se dará cuenta de la cantidad de cosas que haces por el y en la que depende de ti.

Ten en cuenta que la mejor forma para cambiar la conducta de un adolescente es que enfrente consecuencias constantemente. Si solo lo hace de vez en cuando, es como si no lo hiciera nunca. No modificará su forma de actuar.

CASTIGOS  

Aunque es mucho más difícil quitar los castigos que los premios, es necesario hacerlo porque causan el mismo efecto que los premios. “Hago esto solo para que no me castiguen”, pero no es que le importe mucho. No te asustes, es asunto aquí más que quitarlos es transformarlos, convertirlos en consecuencias. Tanto los premios como lo s castigos deberían ser pensados de una manera lógica y orgánica. Si haces algo bien la vida no te deja un regalo en el cuarto. Si haces algo mal, la vida no te castiga llevándose tu celular al más allá por dos semanas. ¡La vida no es así y todos los sabemos!

Para que los adolescentes entiendan los límites, la mejor forma es la natural. ósea en forma de consecuencias. NO PUEDES CASTIGAR A TU HIJO CON ALGO QUE NO TIENE NADA QUE VER CON LO QU EHIZO, PORQUE NO TIENE RELACIÓN Y NO TIENE LA MENOR IDEA DE PORQUÉ NO LO DEBE HACER.

Es muy importante ser buenos acompañantes d ellos hijos y estar cerca de ellos porque solo así vas a conocer lo que están viviendo y vas a poder ayudarlos. Recuerda que un problema con tu adolescente puede hacer que tú pierdas la razón, pero a tu hijo puede perder la vida si no tiene un acompañante equilibrado.

Dale más a tu vida y procura acompañamiento para tu persona adolescentes creando límites y reglas con consecuencias claras , sé que puede y si dudas nunca faltará quienes podamos orientarte y acompañarte.